Sabemos que a simple vista los conceptos de ahorro e inversión pueden sonar extremadamente parecidos. Muchos de nosotros no sabríamos especificar las diferencias entre ellos. Esto puede ser causado porque en diversas ocasiones se utilizan los dos como sinónimos uno del otro. Sin embargo, para entender las diferencias podemos empezar por su parecido: en ambos, aunque el dinero nos pertenece, no podemos gastarlo en el momento.
Aunque este concepto tenga esta similitud existe una principal diferencia entre ellos: el destino del dinero. Por ejemplo, ahorrar es en esencia, abstenernos de gastar el dinero que ya está en nuestro poder, para a corto, mediano o largo plazo poder usar esa cantidad; Mientras que hacer un inversión es abonar dinero para al finalizar el plazo nos aporte dinero extra, es decir, poner a trabajar tu dinero.
Ahora que conocemos la diferencia de ahorrar e invertir, probablemente te estarás preguntando ¿Qué te conviene hacer con tu dinero? Ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas. Comencemos con ahorrar, la gran ventaja es que nosotros mismos podemos establecer nuestro tiempo, cantidad de dinero y en general adaptarlo a nuestra necesidades. Y también podemos destinar una cantidad del ahorro para una emergencia y así disponer de ese monto en caso de ser necesario. Aunque suene maravilloso, la desventaja se encuentra también en esta libertad, es decir: En la libertad de poder disponer de ese dinero, lo que puede hacer que pause nuestro objetivo de ahorrar.
Por su lado invertir significa que debemos respetar otro tipo de tiempos donde normalmente dependemos de un sistema financiero, aunque esto puede parecer una desventaja, lo cierto es que nos impulsa a tener mayor compromiso y disciplina. Es muy importante resaltar que tanto para invertir como para ahorrar es necesario estar debidamente informados, ya que de tener una asesoría inadecuada puede afectar nuestros planes y metas.
Aunque muchas veces parezca que el enfoque de estos conceptos está meramente en lo económico, la realidad es que también existen otros beneficios que podemos tener en cuenta a la hora de tomar nuestra decisión. El ahorrar y/o invertir nos ayuda a lograr nuestras metas, además de ayudarnos a revertir la falta de educación financiera que la mayoría de nosotros hemos sufrido. A ninguno de nosotros nos gusta pensar en un accidente o emergencia, sin embargo estar listos mediante el ahorro, puede quitarnos mucho peso de encima.
¡Puedes mejorar tu disciplina financiera! Al ser conscientes del dinero que tenemos es posible que en consecuencias comencemos a tomar mejores decisiones, lo que inevitablemente mejorará nuestra disciplina y a largo plazo, sin duda alguna, agradeceremos. Claro que no podemos olvidar uno de los beneficios más destacables del ahorro y la inversión y es que al decidirnos por cualquiera de las dos y hacerlo de la manera correcta nos liberará de tener deudas.
Ahora que ya hemos hablado de todos los beneficios financieros que conllevan estos dos conceptos también nos gustaría mencionar que esto puede ser conveniente para nosotros como individuos, pero también es una seguridad necesaria para el resto de nuestra familia. Sabemos que el dinero no compra la felicidad, sin embargo, estamos seguros de que sí existe la estabilidad financiera que te puede brindar tranquilidad.
Sabemos que ahorrar e invertir no te lo da todo, pero te brinda paz en momentos inesperados y necesarios. Todos nosotros sabemos que en la cotidianidad existen situaciones que no podemos controlar y que muchas veces desestabilizan por completo nuestra forma de vida; este es el caso de enfermedades y accidentes inesperados y aunque sabemos que son situaciones de suma inestabilidad, el tener dinero asegurado permite que estas situaciones se vuelvan más sencillas y sobre llevaderas.
Ahora que ya tenemos bastante información podría parecer sencillo decidir ahorrar o invertir, pero aquí viene una de las preguntas clave: ¿cuál me conviene más? La base para esta respuesta es saber para qué queremos nuestro dinero, es decir, debemos conocer la meta de nuestro plan financiero. Nuestra motivación es la base de cualquier elección y es a partir de esto que podemos ver las opciones que conlleva cada una y elegir la que mejor se adapte a nuestras necesidades.
Puede ser posible que una vez que conozcamos todos los beneficios y metas personales aún quede duda de cómo elegir. Es por esto que elegimos algunas preguntas que seguramente podrán ser de gran ayuda.
¿Qué metas quiero cumplir? El definir tus metas es la base para elegir ahorrar o invertir. Es el primer paso que debes hacer antes de tomar una decisión. No es lo mismo querer comprarte un celular nuevo que generar un ingreso extra. Definir tus metas te hará ver todo el panorama completo para tomar una decisión.
¿Es a largo o corto plazo? ¿En cuánto tiempo quieres lograr esa meta? Esto definirá si comienzas a ahorrar por tu cuenta mes con mes o si necesitas invertir una cantidad de dinero específico por cierto tiempo que te ayude a cumplir tu meta e incluso hasta más rápido.
¿Cómo está mi estabilidad financiera actual? Tal vez necesites liquidar alguna deuda primero antes de tomar una decisión. O bien, tener un sueldo base estable. Para tomar una decisión según tus objetivos, primero te recomendamos ver donde estás parado y con qué tipo de ahorro o inversión podrás comprometerte sin desestabilizar tu finanzas actuales.
¿Cuál es tu principal preocupación económica? Tus metas no solo deben tratarse de sueños por lograr, sino también de aquellos momentos en los que necesites tener un respaldo. ¿Qué pasaría si un día te quedas sin trabajo? ¿Te podrías mantener en lo que encuentres uno?
¿Tienes alguna deuda? Si es así, es mejor comenzar con un plan financiero que te ayude a salir de esa deuda sin tener que comprometerte a una inversión que necesites pagar mes a mes.
¿Qué planes tienes a futuro? Tus metas financieras deben adaptarse a las metas de tu futuro. Pregúntate cómo te ves a los 60-70 años y si lo que ganas hoy apoya a esa visión. O si necesitas comenzar a ahorrar por tu cuenta o invertir de diferentes maneras.
Una vez contestadas las preguntas es importante que las mantengamos en mente con la mayor claridad posible para tenerlas presentes en todas nuestras decisiones. Ahora, ¿cómo comenzamos a ahorrar y/o invertir? Con el ahorro es relativamente más sencillo, ya que no es necesaria una asesoría tan profunda sobre el tema. Podemos comenzar a ahorrar poniéndonos una meta al mes y eligiendo herramientas que nos ayuden a lograrlo. Es decir, puedes ahorrar desde en tu cuenta de banco o en el cochinito que tienes en casa, lo importante es comenzar. Con la inversión existen varios diversos productos como seguros de retiro o educacionales. que seguramente serán un gran beneficio en tu vida.
Siempre es atemorizante comenzar nuevas experiencias, pero en cuestiones financieras siempre existen asesores que estarán más que dispuestos a ayudarnos a encontrar la opción perfecta para nuestros planes financieros y de vida. Recordemos que la información es nuestra mejor herramienta en temas financieros, por lo que es válido pedir ayuda y preguntar hasta aclarar cada una de nuestras dudas. El dinero que invirtamos o ahorremos es nuestro y debemos tener seguridad de que estamos haciendo lo correcto con él.
Como mencionamos antes es de vital importancia tener una guía que nos ayude a transitar este nuevo camino financiero y para ello existen productos en los que puedes ahorrar o invertir. Estos productos están pensados especialmente para ayudarte e impulsarte a alcanzar tus metas y definir tus objetivos. Pueden ayudarte a decidir si para ti es más conveniente ahorrar por un tiempo en específico o invertir para generar un rendimiento de tu dinero en un futuro. Podemos tomar como ejemplo un producto para un momento específico, en este caso puede ser un seguro de vida o un educacional. Cuando te decides por este tipo de productos es porque ya tienes una meta y el producto puede llegar a adaptarse perfectamente con ella.
Al elegir productos en inversión pueden venirte a la cabeza el comprar un terreno o mover tu dinero en la bolsa de valores como sucede en las películas. Pero, también puede ser que inviertas en tu yo del futuro o en proyectos a largo plazo donde tu dinero no se vea devaluado. Por ejemplo, pensar y prever el retiro puede ser un gran motivo para invertir. Hacerlo solo puede llevarte a tener más dudas. Puedes apoyarte con cualquier de nuestros especialistas de Seguros El Potosí y podrás encontrar un producto a tu medida para cumplir tus metas. Sea cual sea la decisión que llegues a tomar, con la guía adecuada puedes estar seguro de cuál será la mejor opción. Pensar e investigar sobre ahorro e inversión es el primer paso para cumplir tus metas.
—Seguros El Potosí